CREANDO UNA ANTENA DIPOLO

  
Cuando estamos interesados en comenzar a fabricar una antena, siempre nos topamos con diversas complicaciones de espacio, practica, falta de recursos y/o tiempo que nos llevan a decidirnos por un dipolo. Pero la intención de este artículo es hacer notar que el dipolo de media onda si bien no será el mejor sistema, muchas veces presenta una merma en su calidad por falta de experiencia de los aficionados.

Para comenzar cabe aclarar que muchos principiantes confunden el hecho de que se llame dipolo de media onda con sus medidas físicas reales y cuando llegan a fabricarlo dividen la longitud de onda entre dos y lo conectan al coaxil. Una vez frente al equipo notan que el ROE está por las nubes y que la calidad de la antena es mala y variante. Esta situación esta dada por varios factores:

1. El calculo de la longitud del dipolo se realiza utilizando la siguiente fórmula:
   142.5 / f = Longitud del dipolo en metros.
   Donde f es la frecuencia deseada para el dipolo en megaciclos.
   Ejemplo:
   Deseamos construir una antena para la frecuencia 28.500.
   142.5 / 28.5 = 5 metros.
2. Conexión directa del coaxial al dipolo. Sin querer ahondar en temas muy técnicos, hay que explicar que un coaxial representa un sistema asimétrico, mientras el dipolo es simétrico. A los efectos de esta nota, que pretende ser práctica no explicaremos más que eso y en breve presentaremos una nota al respecto. Evidentemente en ese punto no existe un balance entre ambas líneas: una es balanceada y otra desbalanceada. Para solucionar esto existe el tan mencionado y poco entendido balun (del inglés balanced/unbalanced o balanceado/desbalanceado. Se presentará una nota al respecto en la próxima edición). En este caso se recomienda usar un balun 1:1.
3. Utilizan cable o alambre demasiado grueso. Si bién es cierto que cuanto más grueso es, mayor va a ser la cobertura de frecuencia, hay veces que es inapropiado utilizar uno demasiado grueso. Si uno quiere hacer un dipolo para frecuencias altas (entiendase banda de 10 metros hacia arriba) no estará de más hacerlo un poco más grueso de lo común, pero si uno quiere utilizar para las bandas de 40 u 80 metros con un cable de 2 milímetros o superior sucederá que su propio peso nos complicará por la enorme logitud, el viento lo enbolsará y será más caro sin obtener un resultado mucho mayor que usando uno de 1.5 milímetros.
4. El ángulo que se utiliza. Existen quienes lo hacen perfectamente horizontal y quienes lo hacen en V invertida. El problema generalmente radica en la impedancia que presenta una y otra opción pero si seguimos el consejo de la utilización del balun nos evitamos la cuestión y lo hacemos horizontal.
5. El estiramiento del cable es un problema que no tenemos en cuenta hasta que nuestro dipolo favorito deja de funcionar correctamente sin explicación aparente. Si nosotros ponemos un cable tenso y largo y lo dejamos unos meses, vamos a ver que su propio peso y la actuación del viento lo estiran. Hay quienes tensan previamente el cable dejando que llegue a su estiramiento máximo antes de utilizarlo en algún dipolo, pero lleva tiempo y es tedioso. Personalmente considero que lo más adecuado es que una vez regulado se tomen las medidas y cada tanto constatar que se mantengan y, de ser necesario, corregirlas.